Sor María de la Asunción Pascual Nieto

(Asunción Pascual Nieto). Nació en Villorobe, un pueblo ya desaparecido de Burgos, el 14 de agosto de 1887. Disfrutó pocos días de su madre, ya que fue depositada a los pocos días de su nacimiento en el torno de la Casa de Cuna de Burgos. Vivió diez años en una casa de acogida y luego volvió a la Casa Cuna, lugar que no abandonó hasta su ingreso al monasterio de Escalona, el 6 de junio de 1909, quedando incorporada como religiosa de coro y cantora.

Hasta su abandono forzoso del monasterio en 1936, los superiores le confiaron cargos en las que las relaciones personales, eran un factor importante. Así se le asignó primero el oficio de enfermera, luego en el torno y más tarde el de la puerta.

Por esos años, las religiosas del monasterio de Escalona pudieron comprobar el cambio de actitud hacia ellas de muchos del pueblo, que no perdían tiempo para manifestar su antipatía, incluyendo las difamaciones y desprestigio que iban en su contra. Todo ello llevó a que fueran desalojadas del convento el 28 de agosto de 1936, para favorecen una manifestación hostil a las puertas del monasterio.

El monasterio de Escalona tenía para entonces 14 religiosas. Todas fueron trasladadas a Madrid a una cárcel habilitada en el convento de las Capuchinas de la Plaza Conde Toreno. Se juntaron allí 1.800 mujeres. De ese grupo 800 eran religiosas. Dos meses después fueron llevadas al monasterio de los Benedictinos de la calle San Bernardo, también convertido en cárcel y luego a un sanatorio infantil de los Hermanos de San Juan de Dios, que entonces estaba abandonado.

Finalmente, doce de ellas lograron la libertad. Poco se sabe de sor María de San José Itóiz y de sor María Asunción Pascual Nieto, abadesa y vicaria respectivamente. Se supo sobre el asesinato de sor María Asunción, porque un señor llamado Benito de Almoroz, fue a visitar a ambas religiosas a la cárcel, y encontró muerta a sor María Asunción, reconociéndola por la ropa. Eso fue en el mes de julio de 1936.